Un cable de bujía es un componente básico pero complejo del motor. Lleva la electricidad producida por la bobina de ignición a la bujía. Cuando se expone al calor y la vibración, el carbón en el cable se puede soltar y reducir la conducción entre la bobina y la bujía. Para que el motor funcione de forma óptima, los cables de bujía se deberían cambiar periódicamente. Te mostraremos cómo controlar los cables de bujía para que seas capaz de diagnosticar o evadir una cantidad de problemas, incluyendo fallas del motor o estática en la radio.
Examina los síntomas. Los cables de bujía defectuosos dan señales que delatan su deterioro, incluyendo:
Inspecciona los cables. Usa una linterna o una área muy bien iluminada para hacer una inspección visual de los cables de bujías.
Arranca el motor. Busca los arcos eléctricos o escucha si hay chasquidos que puedan indicar una pérdida de alto voltaje eléctrico.
Usa un cable de puente para conectar a tierra un destornillador bien aislado. Pasa el destornillador a lo largo de cada cable de bujía, alrededor de la bobina, y el arranque. Si ves un arco desde el cable al destornillador, es que hay un cable defectuoso.
Haz una prueba de resistencia de los cables de bujías. Busca valores de resistencia de las bujías en el manual de mantenimiento de fábrica del carro. También puedes buscar en internet la resistencia de cables en el mercado de repuestos.
Inspecciona los resortes que sostienen los cables en la tapa del distribuidor. Los cierres dañados pueden dejar que los cables se deslicen y no se mantengan en su posición.
Determina si los cables de bujías están bien conectados. Mira el manual del vehículo para ayudarte con esta tarea. Las conexiones cruzadas pueden crear pérdida de energía.
Consejos